LA OSTEOARTROSIS: ¿QUÉ ES? ¿CÓMO AFECTA? ¿CÓMO PODEMOS AYUDARTE?
Se trata de una degradación del cartílago articular y de otros tejidos como el sinovial y el hueso subcondral que resultan en una destrucción acelerada de la matriz ósea.
La artrosis es el resultado de factores mecánicos y biológicos que desestabilizan el equilibrio natural entre degradación y síntesis por los condrocitos de la matriz extracelular del cartílago articular del hueso subcondral. Esto quiere decir, una alteración en el mecanismo por el cual se forma y mantiene el cartílago de una articulación.
Desde el punto de vista epidemiológico, la artrosis es la enfermedad articular más frecuente, la causa más habitual de dolor y discapacidad en adultos mayores y la primera causa de cirugías de reemplazo articular. Recientes estudios hablan de mayor frecuencia de artrosis radiológica frente a sintomática, de hecho, se calcula que más del 70% de los mayores de 50 años tienen algún signo de artrosis radiológica, sea cual sea la localización.
Las articulaciones más afectadas son las manos, las rodillas y las caderas, aunque con una distribución variable dependiendo de la población estudiada.
Se conoce que hay ciertos factores de riesgo que pueden aumentar el riesgo de padecer esta enfermedad (distintos según la articulación afectada) como son la edad, osteoporosis, genética y sexo, pero también factores locales, como golpes, traumatismos, ocupación laboral…
Las manifestaciones clínicas más importantes son:
– Dolor: uno de los síntomas más frecuentes localizado en la articulación afectada. Inicialmente aparece con la deambulación y mejora con reposo, pero en estadios más graves puede despertar al paciente durante la noche.
– Rigidez articular matutina: hasta 30 minutos tras el inicio de la movilización articular.
– Incapacidad – impotencia funcional: es la principal causa de invalidez en ancianos, reduciendo la calidad de vida e incrementando el riesgo adicional de morbimortalidad.
– Hallazgos radiológicos más frecuentes: disminución de la interlinea articular, esclerosis subcondral, osteofitos, quistes subcondrales, alteración de los bordes óseos y cuerpos libres intraarticulares. Cambios que no siempre se correlacionan con cambios en los síntomas ni en la función de la articulación.
Es importante, por tanto, hacer una valoración funcional adecuada, que nos muestre en qué medida está afectada la FUNCIÓN de la articulación. Es decir, como y cuanto se mueve, y si lo hace con facilidad y sin dolor o no…
En cuanto a la artrosis en concreto, el tratamiento varía en función del grado de severidad o afectación y de las características del paciente, estando indicado desde una intervención quirúrgica para casos más graves a tratamiento fisioterápico para estadíos más incipientes.
En este punto es donde los profesionales de ÁmacoSalud® te pueden ayudar, ya que nuestros profesionales se han instruido sobre los mejores tratamientos para mejorar la función en situaciones en las que se encuentra alterada, tanto en procesos artrósicos como por ejemplo después de una fractura o una intervención quirúrgica.
A través de una historia clínica exhaustiva analizaremos tus hábitos diarios tanto en actividad como a nivel postural para poder identificar los hábitos que puedan estar afectando negativamente.
Realizamos una valoración basada en diferentes test funcionales donde se trata identificaremos la estructura/s que se encuentran en disfunción. A continuación, se desarrolla un plan de tratamiento personalizado consistente fundamentalmente en técnicas fisioterápicas y algunos ejercicios que ayudan a recuperar tu balance músculo esquelético y a obtener una reducción del dolor y un aumento del rango total de movimiento.
Por último, asesoramos a nuestros pacientes proporcionándoles un programa para realizar en casa, con el que puedan mantener la mejoría lograda a largo plazo.
Si tienes cualquier pregunta, no dudes en acercarte a consultarnos.
JAVIER HERRERO RODRIGUEZ
Fisioterapia y Terapia Manual Ortopédica.
COLEGIADO Nº 47/1626